Amorgos es una isla griega ubicada en pleno mar Egeo y es la más oriental del grupo que conforman el archipiélago de las Cícladas y la más próxima al archipiélago del Dodecaneso. Se localiza a 138 millas marinas del puerto del Pireo y a pesar de ser una de las islas menos turísticas del país, es una de las que más interés están despertando últimamente entre aquellos que eligen los viajes a Grecia para pasar sus vacaciones. Los que recalan en Amorgos, una isla con una superficie de 121 km², 112 km de costa y apenas 1.800 habitantes, lo hacen atraídos por su tranquilidad, su poco desarrollo turístico y sus paisajes de ensueño.
Amorgos posee dos puertos, ambos emplazados en la costa frente a la vecina isla de Naxos: Katapola al oeste y Egíali al este. El lugar más destacado y famoso de Amorgos es el monasterio de Jozoviótisa, que data del siglo XI, y está suspendido en medio de un enorme acantilado a 300 m sobre el mar. Su popularidad creció exponencialmente al aparecer en la película «El gran azul» de Luc Besson.
Hay que tener presente que en Amorgon no hay aeropuerto. Hasta aquí sólo se puede acceder en barco, bien desde el puerto ateniense de El Pireo en Atenas, o desde las islas vecinas de Naxos, Syros, Paros o Milos. También hay que tener en cuenta la época del año en que la queramos visitar. En verano hay múltiples frecuencias en las conexiones, pero éstas se reducen drásticamente en invierno. Dicho esto, a continuación presentamos los mayores atractivos turísticos de Amorgos:
Katapola: es el puerto principal de la isla, y el primer pueblo que descubrirás durante tu viaje. Hablamos de un lugar pintoresco, un pueblecito de pescadores, pero que tiene varios restaurantes y tiendecitas en la orilla de la costa. Aquí es el mejor lugar para alquilar una moto o un quad, que, sin duda, será muy importante para descubrir el resto de rincones de la isla .
Desde Katapola parte un pequeño sendero por el que se accede a los restos de la antigua localidad de Munoa, la residencia de verano de Minos, el primer rey de Creta. Sin duda un paseo que merece la pena.
Aegiali: otro de los pueblos que son dignos de una visita en Amorgos. Localizado en una preciosa bahía, a solo 20 kilómetros al norte de Katapola. Durante el camino puedes detenerte en los pequeños pueblos de Langada, Tholaria y Potamo, una delicia, con sus pequeños callejones y vistas panorámicas sobre la bahía.
Es un lugar para enamorarte de la magnífica gastronomía griega en una de sus tradicionales tabernas o en su pequeño y coqueto mercado. El ambiente es tranquilo y familiar. También es un buen sitio para ir a la playa, una de las más grandes de la isla y sumergirte en el mar.
Chora: la capital de la isla es el típico pueblo de las islas Cícladas, repleto de casas blancas con buganvillas y un conjunto de callejuelas angostas que recuerdan a un laberinto. Posee muchos lugares para comer o cenar a precios muy económicos. Desde la plaza principal de Chora se accede al Kastro veneciano. Erigido en el siglo XIII en la cima de una roca, ofrece vistas de toda la isla. En la capital también se puede aprovechar para realizar una vista al museo arqueológico, con muchos objetos de la civilización más antigua de Europa, la minoica. La entrada al museo es gratuita. Otra recomendación, acercarse hasta los molinos de viento, símbolo de muchas islas griegas y tomar fotos de las vistas que se disfrutan desde allí.
El Monasterio de Panagia Hozoviotissa: se trata de la atracción turística más importante de la isla de Amorgos. Se localiza a apenas 5 minutos de Hora. Este monasterio está dedicado a la Virgen María y fue levantado en el siglo XI, lo que le da el título de segundo monasterio más antiguo de toda Grecia. Construido sobre escarpados acantilados, a unos 300 metros sobre el mar. Para entrar toca subir unos 300 escalones de piedra, pero que resultan toda una experiencia por las magníficas vistas que se divisan conforme vamos ascendiendo. El interior del monasterio también merece una visita. Es gratis, aunque aceptan donaciones.
El barco semihundido de Amorgos: la otra gran atracción de Amorgos es una preciosa playa que cuenta con un barco encallado. Se popularizó gracias a la película del realizador Luc Besson, con su película “El Gran Azul”, con las actuaciones de Jean Reno y Rosanna Arquette. La playa con el pecio hundido se encuentra en el extremo más meridional de la isla. Y, en el extremo sur de la isla, encontrarás un naufragio. Para los que hayan visto el filme, allí es donde el protagonista, Jacques, salva la vida de un soldado americano.
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