Dicen que hay un viaje para cada persona, y en Grecia se pueden hacer todos. Hay tantas opciones de viajes a Grecia como viajeros existen.En efecto, las posibilidades de este destino son incontables y podemos ver desde turismo de mochilero, familias con hijos, intrépidos aventureros, viajeros low cost o multimillonarios con yates de decenas de metros de eslora. A todo el mundo le gusta Grecia, por algo será. De hecho, existen tantas zonas reconocidas como Patrimonio de la Humanidad que es imposible descubrirlas todas en un único viaje. Peor, cada vez son más los que se decantan por Grecia por su gastronomía, un auténtico lujo para los sentidos.
¿Sabías que Grecia es el país de toda la Unión Europea en el que más han proliferado y desarrollado las granjas orgánicas de comida saludable y que solo es posible localizar un restaurante de comida rápida en las grandes ciudades?
Esto es debido a que los griegos son amantes de su cultura gastronómica, defensores a ultranza de los productos de la tierra, de la tradición y del modo de vida tranquilo y relajado. Los griegos saben lo que quieren y esto pasa por mantener vivas sus tradicionales milenarias, la comida casera y los vinos de elaboración propia.
Así que ya lo sabes, si alguna vez en tu vida tienes que invitar a comer a un griego, no se te ocurra llevarle a una cadena de comida rápida, porque serás visto con malos ojos, sino directamente rechazado. Esta circunstancia es también aplicable al revés, ya que pocos son los turistas que no quedan fascinados por las tradicionales tabernas griegas, los restaurantes en primera línea de costa especializados en pescado fresco o sus locales de comida casera donde parece que no pasa el tiempo. Es sólo otro motivo más para viajar a Grecia, la comida, pero, tal vez, sea uno de los motivos de más peso.
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