Ya que estamos sumidos en pleno invierno, con las temperaturas frías en prácticamente todos los rincones de Europa, es un momento ideal para comenzar a planificar las próximas vacaciones. Son muchos los que tienen en mente los viajes a Grecia, ya que es un destino perfecto para desconectar y relajarse, tras unos meses muy difíciles a causa de la pandemia de Covid-19, donde el turismo ha estado muy limitado en casi todos los rincones del planeta.
Grecia es uno de los destinos preferidos, ya que conjuga sol, playas, buen clima, además de ser un lugar donde la seguridad y las tradiciones son dos de sus puntos fuertes, aparte de su cercanía al resto de países de la vieja Europa. La mayor parte de los turistas recalan en Atenas, Santorini, Mikonos o en Corfú, por eso hoy pretendemos ayudaros a descubrir otras islas más desconocidas que son verdaderas joyas, además de contar con la ventaja de no estar tan masificadas por el turismo.
Metana: la península de Metana, se asienta sobre un volcán que emergió del mar. Aquí lo mejor es dejarse llevar por el instinto viajero y descubrir este impresionante paisaje volcánico con vegetación densa, pueblos costeros y diversidad de flora y fauna. El establecimiento del complejo de spa en 1870 lo convirtió en una popular ciudad balneario que atrae principalmente a personas mayores de muchos países europeos.
Ikaria: emplazada en el Mar Egeo, a una distancia aproximada de 20 kilómetros de la vecina isla de Samos, Ikaria toma su nombre de Ícaro, que la leyenda griega clásica cuenta que cayó al mar en sus costas. Se trata de una isla que destila belleza por los cuatro costados. Una isla bastante montañosa. muy salvaje, y que cuenta con rincones prácticamente inaccesibles que han permitido que se mantenga intacta durante milenios. Un lugar de Grecia donde encontraremos preciosas bahías, playas de ensueño y una gastronomía muy particular. Ikaria es conocida por su elevado nivel de calidad de vida, no obstante sus habitantes son algunos de los que más años viven en todo el planeta. ¡Por algo será!
Spetses: Spetses es una isla con una larga tradición naval, y muy conocida por su importante contribución a la Guerra de Independencia de 1821. Fue aquí donde se levantó la bandera de la revolución el 3 de abril de 1821. La isla ha logrado conservar su carácter tradicional individual gracias a sus mansiones, perfectamente conservadas, que aún son testigos del pasado glorioso de la isla. El pintoresco puerto viejo y Dapia, un centro turístico y comercial donde late el corazón de los entretenimientos de la isla, son marcas registradas de la ciudad de Spetses.
Poros: exuberante vegetación de pinos, playas de aguas cristalinas, un animado paseo marítimo adornado con tiendas, acogedores cafés y restaurantes, una capital pintoresca (declarada asentamiento protegido) con grandes mansiones tradicionales y pintorescas calles adoquinadas, así como una amplia selección de lugares de entretenimiento. Estos son los ingredientes de este destino tranquilo y cosmopolita que atrae a visitantes de todas las edades.
Gavdos: la isla ubicada más al sur de toda Europa tiene que estar en esta clasificación por derecho propio. Una isla sin apenas infraestructura hotelera y turística donde el alojamiento tiende a realizarse en pequeños establecimientos rurales regentados por familias nacidas en la propia isla. En Gavdos reina la paz y la tranquilidad, unas vacaciones donde realmente es fácil desconectar del estrés de la vida moderna en las grandes ciudades. De hecho, amplias zonas de la isla no cuentan con cobertura móvil, una bendición para los que busquen simplemente tranquilidad y desconexión total. Recomendables al 100% son las playas de Agios, Ioannis y Potamos.
Egina: la isla de Aegina o Egina es uno de los destinos turísticos más populares, ya que es la más cercana a Atenas, a apenas 25 kilómetros del puerto de El Pireo. Según la mitología clásica, esta isla tomó su nombre de una ninfa, hija del dios del río Asopos, de quien Zeus se enamoró y se llevó a esta isla. La isla de Egina es ideal para vacaciones familiares, gracias a sus playas bonitas y suaves. Es la escapada perfecta dedesde Atenas, y sigue siendo una experiencia original perfecta para hacer en un día.
Skyros: otra de las islas menos conocidas de todas las que integran Grecia. Se trata de una isla bastante grande pero donde reina la calma., el punto fuerte de Skyros es su tranquilidad. Callejuelas empedradas, paisajes alucinantes y una gran variedad: mientras la parte norte de la isla es verde y escarpada, la sur es árida y repleta de magníficas playas. Especialmente recomendables son los arenales de Gyrismata, Atitsa, Palamari y Ahrounes.
Agistri: a apenas 30 kilómetros de la capital de Grecia, Atenas, Agistri es un paraíso del Golfo Argosarónico de muy fácil acceso. Sus aguas turquesas, los pinos y la exuberante vegetación, donde se refugian muchas especies de aves y otros animales, son las características principales de esta pequeña pero encantadora isla de menos de 1,000 habitantes. Hay tres grandes asentamientos en la isla: Megalochori, Skala y Limenaria, donde el tiempo parece haberse detenido hace muchos siglos, a pesar de su cercanía a la metrópoli ateniense.
Hidra: esta isla domina el Golfo Argosarónico, es uno de los destinos más románticos de Grecia. Mansiones de piedra tradicional, calles estrechas y empedradas, plazas aisladas y, sobre todo, la prohibición de automóviles y el uso de alrededor de 500 burros como medio de transporte público, explican la razón por la que Hydra conservó su atmósfera inalterable al paso del tiempo.
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