Los encantos de Santorini

Al momento de pensar en un sitio agradable, bonito, tranquilo y realmente atractivo para unas vacaciones en familia, la isla griega de Santorini resulta ser el mejor destino de todos. En resumen, Santorini es una isla perteneciente al mar egeo, y sin duda alguna es una de las más famosas de todas las islas cicladas. En cualquiera de sus viajes a este sitio, usted podrá descubrir el color de todos sus pueblos, así como el gran atractivo de sus paisajes, siendo esto tan solo algunos de los encantos de Santorini.

Algunos de los encantos de Santorini

Como principal característica, Santorini tiene en casi toda su arquitectura unos muy cuidados colores azul turquesa y blanco, los cuales se pueden sumar al ocre, a los azules claros de sus cielos despejados y a las playas de tierra oscura y fina, que son exclusivamente propios de esta atractiva isla balcánica.

Algunos otros encantos de Santorini son sus vertiginosas calles empedrada, todas sus casas encaladas, los enormes molinos y el hermoso e inmenso mar de color turquesa. En esta zona del mundo griego, el Mediterráneo logra bañar con un toque mágico a esta isla que se reconoce por sus pueblos blanquiazules, como por ejemplo Oia, el cual al caer la noche e iluminarse, parece ser una real constelación terrestre. Esta es una de las razones por las que los viajes a Santorini son tan llamativos a nivel mundial.

Fira (Thira), que es la capital de Santorini, se encuentra situada junto al borde del acantilado, y es definitivamente uno de los sitios que no se puede dejar de visitar en la isla. Esta ciudad que cuenta con una forma alargada, discurre por todo el filo de la caldera hasta la Iglesia de Agíos Minás, la cual data del siglo XVIII y se ha convertido en uno de los principales encantos de Santorini para los turistas.

Otro de los encantos de Santorini es el Puerto Antiguo de Fira (Skála Firón), el cual, a pesar de ser realmente pequeño y se encuentra situado 270 metros bajo la ciudad y junto al acantilado. Para poder llegar a dicho puerto hay que recorrer 588 escalones, usar un teleférico o simplemente hacer un paseo en burro, ya que para llegar hasta el puerto como tal no existe carretera alguna. Sin embargo, ir a este sitio permite conocer un sitio bastante atractivo y que sin duda alguna es realmente uno de los puntos más hermosos de la isla griega de Santorini.