En el país de Israel a la isla griega de Zante se la conoce como la “Isla de los Justos”. Se trata del único emplazamiento de todo el viejo continente que estuvo ocupado por los nazis durante la II Guerra Mundial pero en dónde sus habitntes consiguieron salvar a todos y cada uno de los judíos de la ciudad de caer presos a manos del régimen de Hitler.
En total 275 personas de la comunidad judía de Zante consiguieron salvar sus vidas gracias al empeño del cura del pueblo que logró esconder a todos en casas de familias cristianas y de algo aún más sorprendente, que nadie se chivara a las fuerzas de seguridad alemanas. Así permanecieron durante varios meses hasta que los germanos nazis abandonaron la localidad, un 12 de Septiembre de 1944, un día muy especial para Zante y que cada año se conmemora con una gran fiesta.
Esta anécdota histórica sirve para hacerse una idea del carácter de los habitantes de este mágico rincón de Grecia. Zante o Zacinto, como también se denomina, es una isla helena que forma parte del grupo de las islas Jónicas, un archipiélago ubicado en pleno Mar Egeo. Su capital, es la ciudad de Zacinto o Zante, aunque también se la conoce como Chora, “la ciudad” algo que es típico de las capitales de otras pequeñas islas griegas como es el caso de Mykonos. Apenas cuenta con 15.000 habitantes y una extensións reducidas: posee una superficie de unos 409 km², con una línea costera de casi 123 km y unas dimensiones 40 km de longitud y 20 de anchura. El punto más alto de toda la isla es el monte Vrachionas, de 758 metros.
Zante es un destino paradisíaco para todos aquellos que busquen unas vacaciones de ensueño durante su viaje a las Islas Griegas. Porque aparte de sol, playa, gastronomía y tranquilidad, en Zante, también se respira historia, una historia de hermandad y fraternidad entre pueblos y religiones que es fruto del carácter siempre hospitalario y abierto de sus habitantes, que hace apenas un puñado de décadas, fueron héroes.
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